27 de abril de 2014. Un Ajax muy
superior a todos sus rivales se proclamaba campeón de la Eredivisie tras empatar
a uno en el Polman Stadion. Era la cuarta Eredivisie seguida para Frank de
Boer, que con un estilo de juego muy reconocible y con un gran número de jugadores
jóvenes con futuro como Daley Blind o Davy Klaassen, crearía un equipo que
ya había vuelto a su costumbre de reinar en la máxima categoría del balompié neerlandés, tras la gran sequía que duró
seis años. El técnico holandés era el favorito para ocupar banquillos de
equipos europeos de reputación, como el Tottenham, que finalmente se acabó
decantando por Mauricio Pochettino.